A las y los docentes, delegadas y delegados escolares, y miembros de los Consejos de las 26 Delegaciones y a todas y todos los trabajadores de la educación, les deseamos un feliz regreso a las aulas tras el receso invernal.
Esperamos que hayan podido recargar energías para afrontar los desafíos del segundo semestre con renovada pasión y compromiso.
Les compartimos un documento en donde realizamos un balance de lo que hemos construido colectivamente en esta primera etapa del año y el compromiso de continuar trabajando para lograr mejores condiciones laborales y salariales.
Nuestra fuerza está en la construcción colectiva
En cada aula, en cada patio de escuela, en cada rincón de nuestra provincia, hay una historia que nos une. Somos maestras/os, profesoras/es, trabajadoras/es de la educación que, más allá de nuestras diferencias, compartimos un mismo compromiso: la defensa de nuestros derechos y de la educación pública.
Hoy atravesamos una coyuntura política y social profundamente adversa, marcada por el ajuste, la precarización y los discursos que buscan deslegitimar lo público, lo colectivo, lo democrático y lo solidario.
Ser docente en la Argentina de hoy no implica solo enseñar: también es sostener, resistir y construir futuro donde muchos sólo quieren destruirlo.
Frente a este escenario, la unidad y la organización sindical son nuestra principal herramienta para defender nuestros derechos y lograr mejores condiciones laborales y salariales. Porque cuando caminamos solos podemos avanzar; pero cuando caminamos juntas y juntos, llegamos más lejos y más fortalecidos. Esa es la esencia de nuestra construcción colectiva.
La construcción colectiva es esa mano tendida cuando parece que no hay salida. Es la asamblea donde cada voz cuenta. Es la marcha, el paro, la negociación, el volante, el abrazo. Es todo lo que hacemos juntas y juntos para que nadie nos arrebate lo que hemos ganado con lucha y convicción.
También implica ser claros y firmes: no hay lugar para prácticas que violenten la democracia sindical ni para quienes eligen actuar al margen de nuestras normas estatutarias. Por ello, rechazamos las acciones anti-estatutarias de sectores opositores dentro de la UEPC que buscan confundir, dividir y dinamitar lo que tanto costó construir.
Nada se construye desde el resentimiento ni desde las necesidades político partidarias o la ilegalidad. Se construye y se fortalece a la organización sindical con ideas, con participación, con compromiso por la docencia y con el respeto a las decisiones resueltas democráticamente.
En este contexto complejo, la lucha de la docencia cordobesa, la organización sindical y la resolución orgánica han logrado algo que no es menor: un acuerdo salarial que pone en valor nuestro trabajo y marca una diferencia con muchas otras provincias del país:
- $100.000 por compensación respecto a lo obtenido en los acuerdos para el resto del sector del empleo público.
- Actualización salarial mensual acumulativa con adelanto de pauta e inflación, evitando el deterioro salarial y recuperando poder adquisitivo.
- Cláusula automática de actualización. Es decir que si en el mes de pago de la pauta, la inflación del mes anterior la supera, se paga la diferencia inmediatamente junto con el salario de ese mes.
- Continuidad del FONID para activos y jubilados. Monto que se mantiene actualizado y acumulable por IPC desde febrero a enero. (Sólo Córdoba y Neuquén).
- Incorporación de todo el aumento a junio en el medio aguinaldo del primer semestre.
- Cláusula que incorpora los beneficios logrados por otros sindicatos del sector público si los hubiese.
- Inclusión de sumas fijas al básico, recuperando escalafón, fortaleciendo el salario real, mejorando la base de cálculo para la jubilación y también los haberes jubilatorios.
- Cláusulas de revisión permanente que aseguran un diálogo abierto y la posibilidad de rediscutir en escenarios adversos;
- Recuperación del salario a través del blanqueo y los adelantos de porcentuales;
- Jerarquización para Cargos Directivos actualizable mensualmente según pauta o IPC;
- Mejoras en condiciones de trabajo y compromiso en infraestructura escolar, porque enseñar en condiciones dignas es también nuestro derecho.
- Mesa laboral de trabajo permanente.
- Garantías de estabilidad y derechos laborales ante fusiones y/o cierre de grados, cursos, divisiones y frente al avance de reformas regresivas a nivel nacional.
- Suspensión de FOSAET hasta noviembre conquista conjunta con otros gremios en paritarias.
- Continuidad del BEC para docentes y alumnos.
- Elevación tope para diferimiento y artículo 58 a $1.250.000 y $1.260.000.
- Por el blanqueo acordado en activos los jubilados percibirán un 8.2 % por encima de la pauta.
Con lo expuesto reforzamos la línea de una paritaria anual, con certezas, resguardos y previsibilidad. Cuestiones que fortalecen nuestra resolución colectiva, la cual implicó esfuerzo y militancia, porque la obtuvimos con lucha, no nos olvidemos.
Tampoco debemos olvidar que esa lucha no estuvo marcada por descuentos y vulneraciones de derechos sino por instancias que supimos sortear sin perjuicio del salario o del trabajo de nuestras y nuestros compañeros.
Para reforzar lo resuelto colectivamente por las y los docentes podemos trazar algunos comparativos con lo que sucedió en otras provincias que padecen las políticas de ajuste y vulneración:
- En muchas jurisdicciones, los aumentos salariales están por debajo de la inflación generando una pérdida profunda del poder adquisitivo.
- Se aplican topes o sumas en negro, que perjudican tanto a activos como a jubilados.
- No hay paritarias abiertas ni participación sindical real, lo que lleva a decisiones unilaterales y arbitrarias del poder político.
- Se vulneran derechos adquiridos, se criminaliza la protesta y se busca imponer miedo en lugar de diálogo.
- En varias de las provincias se están aplicando formatos directos e indirectos de presentismo.
- Hay despidos, cierre de programas, recorte de cargos y congelamiento de presupuestos educativos, quita del descuento por ley de la cuota sindical generando desfinanciamiento a las organizaciones.
Estas diferencias no son casuales sino causales. Son el resultado directo de cómo se concibe la lucha colectiva, de cómo se defiende la educación pública en cualquiera de sus gestiones y de cómo se construye el poder de las y los trabajadores organizados.
Nuestra fortaleza no se centra en una sola persona, ni en una sola escuela, ni tampoco en un solo Departamento. Está en la inmensa red que tejemos en cada encuentro, con cada debate y con cada acción. La UEPC es, ante todo, un corazón colectivo que late con fuerza cuando estamos unidos, comprometidos con la verdad, con la justicia y con el bienestar de nuestras comunidades educativas.
Por eso, en estos tiempos difíciles, pongamos el oído y el hombro más que nunca, abracemos la organización y lo colectivo para seguir construyendo. Porque cada conquista es fruto de la unidad, cada paso hacia adelante lo damos con los pies de todas y todos, y cada intento de debilitarnos será siempre respondido con más democracia, más participación y más escuela pública.
Colectivamente, seguimos trabajando y exigiendo:
- Condiciones adecuadas para enseñar y aprender sin sobrecarga laboral.
- Finalización de la titularización de docentes de Adultos, ProA y Coordinadores de Curso.
- Cobertura del BEC para docentes rurales que aún no lo tienen.
- Eliminación definitiva del FOSAET.
- Normalización de las prestaciones de Apross en toda la provincia.
- Eliminación del diferimiento jubilatorio y del artículo 58.
- Paritaria Nacional Docente.
- Restitución del FONID.
- Nueva ley de financiamiento educativo.
- No a la reforma del régimen jubilatorio especial docente.
- Presupuesto para las universidades públicas.
En defensa de las y los docentes y de la educación pública.
Construimos presente, proyectamos futuro.